El desempleo en México baja pero la mala paga sube
- Miriam Zirdok Smeke
- 28 ago 2017
- 3 Min. de lectura
En México el desempleo está bajando, pero la paga de menos de 1 salario mínimo está en su apogeo, todo listo para terminar con una población económicamente estable y comenzar a llamar al hambre a la puerta del país.

La Tasa de Desocupación, referente al porcentaje de la Población Económicamente Activa (PEA) que no trabajó siquiera una hora, fue de 3.3% de la PEA a nivel nacional, cifras que dio a conocer el INEGI en junio.
Durante el mes de junio de 2017, el 59.3% de la población de 15 años y más en el país se ubicó como económicamente activa, de acuerdo a datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
La Tasa de Informalidad Laboral –que incluye además del componente que labora en micro-negocios no registrados o sector informal a otras modalidades análogas como los ocupados por cuenta propia en la agricultura de subsistencia, así como a trabajadores que laboran sin la protección de la seguridad social-, se colocó en 56.6% de la población ocupada durante junio de este año
Del 59.3% de la población económicamente activa, el 56.6 % se encuentra en la Tasa de Informalidad Laboral (no pagan impuestos), en total el 3.3% se encuentra en la Tasa de Desocupación.
Si analizamos estas cifras podemos deducir que solamente un 2.7% de la población económicamente activa paga impuestos.
La CDMX ha perdido 303,000 empleos con sueldos de más de 5 salarios mínimos, mientras que en el país se crearon 854,000 plazas con menos de 1 salario mínimo como paga.
En su reporte mensual, el organismo dependiente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) expuso que desde 2001 a la fecha, el promedio de crecimiento económico de México es de 2.2 por ciento.
Esta es una cifra grave ya que si queremos que el país crezca debemos de generar empleos, invertir el dinero del país en generar fábricas, negocios, empresas y emplear a la gente, esta va a ser la única forma de saciar el hambre.
Pero con 2.7% de la población económicamente activa que paga impuestos, y el gobierno corrupto, es difícil alcanzar este sueño sin someternos a la deuda externa. Lo que deberíamos de hacer es que los monopolios o la gente con mucho dinero abra empresas, y también que el gobierno otorgue dinero para que las personas puedan abrir micro-empresas, y así generar flujo de dinero local, y nacional.
Lo anterior incidió en la desaparición de 1.83 millones de puestos de ocupación y empleo que pagan más de cinco salarios mínimos del cuarto trimestre de 2000 al primero del 2017, según cifras del INEGI y los reportes de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
La precarización laboral también ha implicado la generación de ocupación y empleo precario, que paga menos de un salario mínimo, con 854,000 puestos desde 2001, lo que muestra la desaparición de empleo bien remunerado a cambio de ocupación de menor ingreso
Baja el desempleo porque los trabajos son tan necesarios en México, que cualquiera está dispuesto a trabajar por tan solo unos cuantos pesos y eso es lo que está sucediendo. Las empresas están creando salarios muy bajos QUE PAGAN MENOS DE UN SALARIO MÍNIMO. Y mientras se pierden los trabajos bien remunerados, con cinco salarios mínimos, los muy bajos suben, y por eso se está pudiendo emplear a tanta gente, o están pagándole o dándole la oportunidad a muchos, por un mal salario.
La solución comenzará cuando todos los mexicanos estemos conscientes del valor de nuestro trabajo, y cuando las empresas se comiencen a dar cuenta que los mexicanos no estamos dispuestos a trabajar por malos salarios o sin salario. Ahí será cuando todo cambiará y tendrán que subir los salarios. Pero el problema comienza cuando el hambre entra por la puerta y la desesperación por la ventana.
Un país con hambre aceptará malos salarios, y mientras más malos sean los salarios y más plazas se abran, más gente será apta para los puestos, pues sin estudios, ni experiencia previa, los mexicanos nos sentimos que cualquier trabajo es bueno en ese momento.
Pero la única solución y vía posible que yo le encuentro al problema es reclamar una vida digna, y esto se genera solamente alzando la voz.
Y si por esos que no pueden dejar su trabajo porque el hambre es demasiado insistente, estamos muchos otros que DEBEMOS EXIGIR LAS CONDICIONES DE UNA VIDA MEJOR, BUENA Y DIGNA PARA AQUELLOS QUE SON NUESTROS HERMANOS MEXICANOS.
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